Hace unos días decidimos darnos un descanso tras la gran temporada de bodas que tuvimos, junto a un grupo de amigos y sus hijos dimos rumbo a los Arribes del Duero, concretamente a Fornillos de Fermoselle y nos alojamos en la Casa de los Arribes, un conjunto de tres casas rurales fantásticas y acogedoras que gestionan Merche y Victor, los dueños y que ya conociamos, ya que ahí pernoctamos cuando organizábamos una boda en los arribes de Zamora.
Llevábamos tiempo imaginándonos organizar una boda con frutos rojos, y cuando comenzamos a pensar en la decoración de la boda de Laura y Jorge me venían a la mente las imágenes de esa boda con frutos rojos que rondaban en mi mente.
Laura es creativa, de rostro dulce y ojos penetrantes, de sonrisa amplia y espíritu arrollador, tiene un trabajo muy acorde a su forma de ser, ademas de fantasiosa y activa Laura es una de esas personas que quieres que estén cerca de ti siempre porque su energía es contagiosa.
Jorge es casi lo contrario, mas tranquilo que Laura, podría decirse que es la cabeza pensante de la pareja, el que hace que Laura ponga los pies en la tierra de vez en cuando aunque también tiene su fondo de fantasía y diversión pero de una forma mas discreta. Son complementos perfectos, Laura y Jorge o Jorge y Laura.
La boda de mi hermana en Madrid se celebró el pasado mes de Agosto. Fue una boda muy esperada , la pareja en cuestión lleva la friolera de 16 años juntos y toda la familia deseábamos que llegara este momento.
Desde un principio me volqué en ayudarla con todos los detalles, la búsqueda del lugar de celebración, el catering, la elección de los manteles, las sillas, los centros de mesa, el ramo de novia… fueron un montón de detalles, y mi hermana tuvo que sufrirme hasta que ya tomó la decisión de dejarlo todo en mis manos. Es como organizar tu propia boda pero sin casarte, le contaba lo que iba decidiendo y todo le parecía bien.
